Pack Pintura

Ahora que hace buen tiempo podemos aprovechar a pintar las paredes de la casa. Ya sea porque ya les toca una mano de pintura o porque estamos aburridos de su color y queremos cambiar un poco la decoración, es ahora en los meses veraniegos, cuando debemos aprovechar a pintar, ya que podemos dejar abiertas las ventanas y que con el calor se seque más rápido.

Para no volvernos locos en el intento, desde Matías Jadraque te indicamos una serie de pasos a seguir para que se haga de la forma más rápida y sencilla.

1. Prepara la habitación para pintarla

Aunque muchas veces se subestime este paso, puede ahorrarnos mucho tiempo en el proceso completo de pintar una habitación. Lo primero lógicamente es retirar todos los muebles y cuadros que se puedan mover fácilmente. Si la habitación dispone de muebles grandes como una cama o un armario, los separaremos de las paredes y los cubriremos con una sábana o plástico para que no les caiga ninguna gota.

Si es posible quitaremos las puertas y ventanas, así como quitar las lámparas o embellecedores de los enchufes (para mayor seguridad corte la corriente eléctrica).

Enchufe Ii

Una vez que está todo retirado, con la famosa cinta de carrocero (una cinta de papel), debemos delimitar los espacios que se han decidido pintar. En el mercado disponemos de varios tipos de cintas, de diferentes tamaños, con lo cual lo ideal sería tener una más fina y otra más ancha para poder cubrir así todas nuestras necesidades.

Hay que tapar el encuentro entre los zócalos y la pared, alrededor de los interruptores de luz, marcos de ventanas y si se quiere pintar las paredes en dos colores, o el techo en otro color, una vez pegada, hay que retirarla antes que la pintura se seque totalmente, para que salga fácilmente, sin resto de pintura.

2. Preparar la superficie

Si las paredes y el techo están en buen estado se pueden pintar directamente, pero si las capas de pinturas de años anteriores se han levantado o poseen arrugas, hay que retirarla.

Para ello necesitamos una espátula, y una lija fina. Cuidando luego de limpiar bien el polvo que pueda quedar.

En el caso de que existan fisuras o grietas se tienen que tapar con pasta tapagrietas. Es muy importante seguir las instrucciones de cada fabricante, sobre todo los tiempos de secado para evitarnos luego resultados no deseados.

Si la superficie es nueva o es demasiado porosa, es importante darle una mano de fijador con pintura selladora (imprimación con pintura látex).

3. Preparado de la pintura

Si la pintura es de primera calidad, la cobertura será excelente y puede que con una mano sea suficiente, además de que puede durar entre 5 y 8 años en excelente estado.

Si el bote es nuevo, una vez abierto, debe remover la pintura con movimientos circulares y hacia arriba hasta que su consistencia sea homogénea. Si el bote de pintura ya estaba empezado, hay que retirar la pintura seca con mucho cuidado para que no caiga dentro del bote, sino la pintura tendrá grumos.

Lo ideal es pintar un día fresco, seco y con buena ventilación, evitando a ser posible los días húmedos o lluviosos o los de mucho calor.

Muy importante: si aplica más de una mano de pintura deje secar entre una y otra, el tiempo que le indique el fabricante.

4. Comenzar por los altos

Techo

Siempre se comienza por el techo, porque si cae alguna gota de pintura sobre las paredes, estas se tapan después. Para protegerse la vista por si cae alguna gota sobre usted, venden gafas para proteger los ojos.

Para pintar un techo cómodamente se necesita un rodillo y una extensión, para poder

mover el rodillo desde abajo. Los ángulos y las zonas más cercanas a las paredes se pintan con brocha.

Debe saber que existen varios tipos de rodillos dependiendo de la superficie a pintar: de lana o sintéticos de pelo corto para paredes lisas y de lana o sintéticos con pelo largo para las paredes con gotele, por lo que es muy importante que elija el adecuado.

También necesitará una brocha normal para las molduras del techo y una brocha redondeada con punta para las esquinas y ángulos.

Lo primero es pintar con brocha los ángulos y las zonas más cercanas a las paredes. Si ha tapado grietas pase la brocha para evitar que absorban la pintura después y queden más oscuros.

Una vez acabado estos pasos, ya podemos pintar el techo con el rodillo. Para evitar que gotee demasiado, cuide que no tenga exceso de pintura, escurriéndose previamente y repartiendo la pintura de la manera más uniforme posible.

Primero se dará una mano de forma vertical y después de que se seque, otra horizontalmente para evitar marcas. Por último una capa final en el mismo sentido que la anterior.

5. Continuar con las paredes

Igual que se ha pintado el techo, se seguirá con las paredes, observando en todo el momento las recomendaciones dadas por el fabricante o su vendedor.

Si pinta también con rodillo, moverlo de arriba hacia abajo para obtener un acabado parejo y perfecto.

Nota: no deje la cinta para enmascarar mucho tiempo, sino al retirarla arrastrará parte de la pintura.